Las empresas de producción forestal del Corazón de la Isla sufren la fuerte caída en sus ventas y los empresarios entran en situación de riesgo. Las finanzas se desplomaron en los últimos meses y no existen visos de recuperación. En las últimas horas, 30 familias, protestan en las afueras del antiguo Aserradero Guaraní al enterarse del posible cierre del emprendimiento icono de la ciudad. Se le adeudan dos sueldos.
Si bien, la familia Fregosini, quienes son los autores y protagonistas del proyecto decidieron alejarse de la actividad- conciliaron un acuerdo comercial- con un empresario local, en razón de ello, la empresa continuaba produciendo productos: principalmente, pallet y madera de construcción, también se elaboraban aberturas y muebles, pero debido a la falta de mercado, en menor cantidad.
Este martes a las 20 horas, alrededor de 7 empresarios forestales, se reunieron en la Cámara de Comercio local y entre lágrimas se expuso la grave situación. También reclamaron que las políticas Provinciales no van en sintonía con el sector; observaron que se anunció la construcción de 1260 viviendas para la ciudad de Ushuaia y Río Grande y a los madereros solo le dan participación en la compra de algún producto no haciéndolos parte del plan de viviendas. Consideran que siendo partícipes en algún porcentaje en la construcción, sería una verdadera solución, pero no serian tenidos en cuenta.-
No se descartan fuertes medidas en las próximas horas, en base a que la problemática del sector, no es atendida desde hace años y ahora se entraría en el proceso de cierres de varios emprendimientos por considerar que la crisis es cada vez peor. Desde el Gobierno se habían implementado dos medidas políticas para inyectar recursos al sector pero solo lograron resultados temporales; primero un acuerdo de compra de mobiliario y luego la otorgación de subsidios de 5o mil pesos con destino algunos productores.-
En el transcurso de este día miércoles, se expondrá un petitorio, con carácter de urgente con el aval de la mayoría del sector productivo y de los trabajadores.-
En el caso particular, del Aserradero, a cargo de Sergio Dittler, el problema principal surge a partir de la fuerte caída en las ventas y una serie de embargos que no le permiten oxigenar sus cuentas. Alrededor de 30 familias reclaman por 2 sueldos caídos y sus bajas laborales.-