TOLHUIN PRIMERO TIERRA DEL FUEGO | ARGENTINA.
Cerca de las 11 de la mañana la rotonda de Maipú y Yaganes se encontraba cortada al tránsito. Y es que en ese punto se encuentra justamente la placa conmemorativa a los 44 tripulantes del ARA San Juan. Este 8 de noviembre se cumplió un año de la vez que el submarino partió del muelle auxiliar de la Armada con destino a Mar del Plata, lugar al que nunca llegó.
Los familiares de los tripulantes desaparecidos comenzaron a verse temprano. La convocatoria era a las 11. En el lugar una pantalla gigante que peleaba contra el viento y la llovizna exponía los nombres e imágenes de cada uno de los tripulantes. El protocolo anunciaba el inicio del acto, donde se descubriría una placa conmemorativa con los nombres de cada uno de ellos grabada.
Con la entonación del himno nacional argentino se dio inicio al acto oficial. A la derecha del atril se podían ver a los familiares, muchos abrazados entre ellos, exponiendo banderas o remeras con imágenes de sus padres, hijos o hermanos perdidos. Tras entonarse el himno un video con imágenes volvió a mostrar a cada uno de los 44 tripulantes del ARA San Juan.
La invocación religiosa estuvo a cargo del padre Luis Ascona tras la cual comenzaron tomaron la palabra los familiares de los tripulantes. Isabel Vilca, hermana de Daniel Alejandro Polo, fue la primera de los familiares en tomar la palabra.
La mujer agradeció la presencia de los asistentes y recordó que a las 12:30 horas, aproximadamente, el submarino ARA San Juan había partido de aquel lugar. “Ellos, 44 servidores de la patria, que arriesgaban sus vidas, a sabiendas que un día podían no regresar, tan orgullosos de compañerismo y camaradería, que se supone la Armada”.
Sin poder contener su dolor, Vilca remarcó que “es de público conocimiento que algunos marinos de alto rango se les ha olvidado eso ¿dónde habrá quedado la frase ‘un marino no abandona a otro marino’?”. Tomando una pausa para contener el llanto, Vilca prosiguió recordando que días después, el 15 de noviembre, se informaría por parte de la Armada la falta de comunicación del submarino con la base naval y el inicio del operativo SAR (búsqueda y rescate por sus siglas en inglés), y el 22 de noviembre anuncio de que hubo un evento “anómalo, explosivo, no nuclear”.
“Angustia, incertidumbre, dolor y llanto interminable vivimos los familiares desde ese día, 15 de noviembre de 2017” sentenció Vilca quien advirtió que a pesar de no tener noticias certeras de dónde están, “nosotros no vamos a bajar los brazos en esta lucha. Que es cruel, larga y sufrida, pero no imposible”.
Reclamó que “peleamos contra un estado ausente, un gobierno ausente. Una trama de mentiras y ocultamientos; y aún así estamos acá de pie, haciéndole frente porque ellos se lo merecen. Porque es un derecho nuestro saber qué pasó”, haciendo hincapié que “hay niños que esperan a su papá”.
Agradeció a “los legisladores que están desde el principio con esta causa, además de la sociedad que nos acompaña, porque sí hay gente que es mal intencionada y piensa que nosotros buscamos lucrar con esto”.
Otra de las oradoras de la jornada fue Ramona Alfaro, hermana del tripulante Cristian David Ibáñez quien agradeció el acompañamiento y resaltó que “estamos aquí presentes con la esperanza más grande de nuestra historia, esperanza que no morirá”.
Lucía, hermana del teniente Adrián Zunda Meoqui también hizo uso de la palabra en el lugar y recordó que los 44 submarinistas “patrullaban la soberanía de nuestra nación” y remarcó que “amaban lo que hacían, con amor y dedicación”.
“Personas que en sus vidas cumplían diferentes roles: hijos, esposo, hermanos, padres” continuó, destacando que “dedicaron su vida a ser los mejores de los mejores. La mejor tripulación submarinista a bordo del San Juan hasta el día de hoy desaparecidos”.
Cuestionó la injusticia de que el Gobierno, “quienes le dan las ordenes, les dieron la espalda desde el primer momento. Queriendo hacer como si nada hubiese ocurrido, a ellos principalmente”.
Marcela Moyano, esposa del tripulante Hernán Rodríguez aseguró que “estamos cumpliendo una etapa muy conmovedora. Una historia que empezó para nosotros un 16 de noviembre cuando nos avisaron de la falta de comunicación”.
Para Moyano “continuamos, pero es muy larga, es muy dura esta lucha que estamos teniendo” y resumió la misma en tres palabras: lucha, abandono y fe y esperanza. “La lucha de los familiares que no vamos a parar hasta saber la verdad, hasta encontrarlos, porque ellos no merecen ser abandonados, el abandono de un gobierno que es terrible” prosiguió.
“Queremos que el estado los busque, que actúe hasta encontrarlos” reclamó y “una fe y esperanza que no cae, que la tengo presente. Que la familia la tiene presente, que sabemos que los vamos a encontrar” pidiendo a Dios “que va a hacer la justicia” y que “las personas que tuvieron que ver, paguen como tengan que pagar”.
Andrea Mereles, esposa del suboficial Ricardo Gabriel Alfaro Rodríguez quien recordó que desde ese día “ya nunca más volví a escuchar la voz de mi esposo. Ese día fue la última vez que hablé con él, que me mandó algunas fotos”.
Remarcó que “a pesar del dolor y la angustia, que estamos pasando las 44 familias seguimos de pie marchando por saber la verdad” y reclamó “que el gobierno y todos los culpables se hagan responsables de todo este hecho tan doloroso” y que “paguen con cárcel común y que por favor continúe la búsqueda”.
Respaldo fueguino
La gobernadora Rosana Bertone también tuvo oportunidad de hacer uso de la palabra. La mandataria fueguina, visiblemente conmovida, destacó la “profunda vocación de servicio” de los tripulantes, y que dedicaron “su vida y su esfuerzo a servir a la patria”.
“Nada se puede comparar con los sentimientos que ustedes viven” dijo a los familiares presentes, y que “la palabra homenaje no alcanza para describir este acto” y aseguró: “hoy más que nunca asumimos la lucha que ustedes llevan. Hoy les decimos que este es su lugar, que aquí podemos compartir. Hoy les decimos que quienes partieron de este puerto son también nuestros hermanos, y que como ustedes seguimos esperando”.
La mandataria remarcó que “la ausencia de explicaciones hace imposible cicatrizar heridas” y que es un derecho “encontrar esas explicaciones” de cada uno de ellos “pero también de todos los argentinos”, haciendo hincapié en que “lo necesitamos como Nación, como país”.
“Como fueguinos y fueguinas sentimos dolor, pero también déjenme decirles que sentimos orgullo” finalizó la mandataria, quien hizo “un agradecimiento a todos: sus hijos, sus hermanos, su familia”.
Búsqueda incansable
Finalizado el acto, Marcela Moyano, quien no había estado en Ushuaia hasta el momento, y aseguró que “esta posibilidad de haber visitado Ushuaia fue para nosotros increíble”.
Contó que pudo conversar con gente “como este señor que recién se arrimó para darme el abrazo que le dio a Hernán (Rodríguez, su marido) en el momento que partió” y agradeció “el cariño que hemos recibido de la gente, testigo, que estuvo en el último momento antes que zarpara el submarino”.
Ante la consulta sobre la expresión de abandono y reclamo hacia el Estado Nacional, Moyano recordó que “no sabemos el por qué de parte del Gobierno. Porque en este año que ha pasado, dos veces hemos tenido oportunidad de juntarnos con el presidente, y tres o cuatro veces con el señor ministro, Aguad (Oscar, Ministro de Defensa) donde ellos siempre condicionaron la visita” poniendo las reglas para el diálogo.
“No elegimos estar hoy acá, ni estar viviendo lo que estamos viviendo, pero hoy nos tocó. Siento el abandono por parte del gobierno” remarcó la mujer.
Consideró que la continuidad de la búsqueda “fue pura lucha de la familia de habernos quedado 6 meses durmiendo en la base naval, haber estado 52 días acampando en la Plaza de Mayo como lo hicimos y de seguir con esta lucha”. Finalmente, Moyano insistió en que “queremos llegar a la verdad, queremos saber qué pasó con los chicos”.
Familias en Almanza
Familiares de los 44 tripulantes del submarino “ARA San Juan” visitaron la Escuela Provincial “44 Héroes del Submarino ARA San Juan” de la localidad de Puerto Almanza, al cumplirse un año de la partida del buque que hasta el momento permanece desaparecido.
Puerto Almanza fue uno de los últimos lugares donde pudo avistarse al submarino navegando en la superficie de las aguas del Canal Beagle. Una semana después, se perdió todo contacto con la nave que se dirigía hacia su base del puerto de Mar del Plata.
Los familiares visitaron la Escuela “44 Héroes del Submarino ARA San Juan” donde fueron recibidos por el secretario de Educación Pablo Gattamora, el director Provincial de Modalidades Educativas Dr. Maximiliano Chulver y la directora Provincial de Asuntos Jurídicos Dra. Cristina Marczuk.
Los familiares se manifestaron emocionados y agradecidos por la decisión del gobierno provincial de homenajear a los tripulantes, imponiéndole el nombre a la institución.
El secretario de Educación explicó la importancia y sentido que tiene para nuestra provincia lo sucedido “por este motivo queríamos que visitaran este establecimiento educativo, que lo sientan como su casa. Nuestra gobernadora decidió continuar no sólo con las escuelas rurales como lo es este establecimiento, sino recordar a los 44 tripulantes del ARA San Juan colocándole su nombre a la escuela y que de este modo, no se los olvide”.
Una de las familiares hizo entrega de una bandera argentina al Secretario de Educación, con la inscripción del Submarino ARA San Juan y el nombre del tripulante, para que la misma sea entregada a la docente que dicta clases en la Escuela de Puerto Almanza “44 Héroes del Submarino ARA San Juan”.
Antes de regresar a la ciudad de Ushuaia, familiares y funcionarios entonaron de forma muy emotiva el Himno Nacional Argentino.
