Una joven de 23 años fue encontrada muerta en su departamento de Gran Manchester, Inglaterra. Según reconstruyó Tribunal Forense de Bolton, llevaba más de un año fallecida y su última conversación fue con ChatGPT, del chatbot de inteligencia artificial (IA) desarrollado por Open AI.

La familia de Charlotte Leader describió a la joven como «bella y talentosa». De acuerdo con medios británicos como The Sun y Mirror, durante gran parte de su vida Leader luchó contra trastornos alimentarios, incluida la bulimia, y estaba completamente desconectada de su familia.
Su madre, Chantay Simm, declaró que no habían tenido noticias de ella desde septiembre de 2021. A pesar sus esfuerzos por contactar a su hija, aseguró que Charlotte era “imposible de encontrar”.
El hallazgo ocurrió cuando oficiales de policía fueron llamados al piso de Charlotte para realizar un control de bienestar, luego de que la empresa de beneficio social Bolton at Home no pudiera ingresar para una inspección de servicios de rutina. Las alarmas se activaron tras notar un “gran volumen de cartas” apiladas detrás de la puerta principal.
Charlotte fue encontrada muerta en su departamento de Gran Manchester, Inglaterra. Foto: Facebook.
Al acceder al piso, los oficiales encontraron a Charlotte en su cama debajo de un edredón, “como si estuviera durmiendo”. El doctor Andrew Coates, patólogo del Royal Bolton Hospital, explicó que la examinación fue “difícil” porque el cuerpo se había “momificado”, un proceso que, según él, era “razonable” que tardara alrededor de un año.
El forense Stephen Teasdale señaló que Charlotte había permanecido “sin ser descubierta por algún período de tiempo”. Los oficiales encontraron alimentos en su heladera con fechas de vencimiento de julio de 2024.
La última conversación de Charlotte con ChatGPT
El detective inspector Paul Quinn describió el departamento del primer piso como “escasamente amueblado” e “inmaculadamente limpio”. El forense también comentó que el piso estaba “inmaculado” cuando los oficiales investigaron.
Su hermana, Caroline Calow, agregó que “no había absolutamente ninguna medicación en ese piso en absoluto». «Parecía la vivienda de alguien que se preocupaba, no era el piso de alguien que se había rendido”, señaló.
La investigación forense arrojó luz sobre el extremo aislamiento que vivía Charlotte. El forense Teasdale, ante el Tribunal Forense de Bolton, indicó que Charlotte había “sufrido problemas de salud mental”. Con el tiempo, ella se convirtió en una extraña para su familia, «alejó a la gente y se desconectó también de los servicios de salud mental”.
Charlotte había rechazado una cita con los servicios de salud mental en 2022 y no tuvo contacto con ellos posteriormente. Sus vecinos afirmaron que nunca la vieron salir de su casa en Bolton.
El detective Quinn revisó el teléfono de Charlotte y confirmó que las únicas conversaciones, que datan del 30 de julio de 2024, eran entre ella y ChatGPT, a quien ella pedía «ayuda».
El peritaje de su teléfono reveló un pedido de «ayuda» a la inteligencia artificial. Foto: Pexels.
«Ayúdame, fui y conseguí comida otra vez”, escribió Charlotte a ChatGPT. La IA respondió: “Pareces sentirte en conflicto por tener comida”, a lo que Charlotte replicó: “Es comida que no quería y eso es frustrante”.
El detective Quinn detalló que «había otros mensajes, todos en el mismo contexto», y que no había conversaciones con nadie más. «Su único contacto fue con ChatGPT”, dijo.
Aunque se encontraron cajas de un limpiador de desintoxicación, los oficiales no hallaron «nada que sugiriera que tenía la intención de quitarse la vida, o algo que sugiriera que haría algo inapropiado”. Tampoco se encontraron sustancias como drogas.
El docto Coates no pudo determinar la causa de la muerte de Charlotte, aunque señaló que los trastornos alimentarios pueden hacer que las personas tengan un “peso peligrosamente bajo”. El forense Teasdale cerró la investigación con una conclusión de tipo “abierta” y ofreció sus condolencias a la familia.
TOLHUIN PRIMERO TIERRA DEL FUEGO | ARGENTINA.
