La UNESCO declaró que en esta fecha se conmemore el »Día Mundial del Folclore», elegida en recuerdo a aquel 22 de agosto de 1846, cuando el arqueólogo británico William G. Thorns publicó en la revista londinense “Atheneum” una carta en la que por primera vez usó el término “Folclore”.
El folclore es la expresión auténtica de un pueblo que abarca sus tradiciones, leyendas, costumbres, música, danzas, etc. Precisamente estas peculiaridades distinguen una cultura de otra.
El término “folklore” de origen inglés y creado por el arqueólogo británico Thomson buscaba acuñar una palabra que englobara lo que por aquellos días se conocía como “antigüedades populares”, en la actualidad la definición es más amplia abarcando la “comunicación artística en grupos pequeños”, según la Wikipedia.
La Real Academia Española castellanizó el término, que ahora emplea la letra “c” en vez de la “k” original, y lo define como el “conjunto de creencias, costumbres, artesanías, etc. tradicionales de un pueblo”, así como también a la “ciencia que estudia estas materias”.
Cuando el arqueólogo británico unió las palabras “folk” (pueblo), y “lore” (sapiencia), no podía imaginar que iniciaría una tendencia a la revalorización de ideas primigenias que hacen al saber de cada pueblo y también de las propias manifestaciones culturales que han logrado sobrevivir hasta la actualidad.