Los jueces del Tribunal de Juicio de Ushuaia, Alejandro Pagano Zavalía, Maximiliano García Arpón y Rodolfo Bembihy Videla, condenaron a Héctor Darío “El Gringo” Weiss a la pena de ocho años por el abuso sexual de dos menores de 8 y 14 años. Pero seguirá en libertad porque la condena aun no esta firme.
Weiss fue condenado «por los delitos de abuso sexual simple (reiterado en un número indeterminado de veces), y abuso con acceso carnal. Recordemos que la Fiscalía representada por el Fiscal Eduardo Urquiza y una de las querellas representada por la abogada Karina Echazu habían solicitado que se lo condene a ocho años de prisión.
Por su parte, el abogado Vladimir Espeche, que representa a la familia de la otra presunta víctima, requirió una condena de 3 años y 6 meses de prisión efectiva.
A su vez, el defensor oficial de Dario Weiss, habia solicitado ayer la absolución del imputado, en uno de los casos “por el beneficio de la duda” y en el otro por haber desplegado una conducta “atípica” para el delito por el que está acusado.
Según detalló el propio Poder Judicial en un parte de prensa, el Tribunal Oral en lo Criminal de Ushuaia escuchó primero el alegato de Espeche, quien consideró al empresario como autor material y penalmente responsable del delito de “abuso sexual simple”.
En cambio, Echazú, que alegó luego, acusó por las figuras de “abuso sexual simple y estupro”, mientras que el fiscal Urquiza encuadró lo ocurrido como “abuso sexual simple reiterado y abuso sexual simple reiterado y abuso sexual con acceso carnal”.
La abogada Echazú definió al pedido de condena realizado por el fiscal como “adecuado” y acorde a la línea de acusación de las querellas.
El empresario, dueño de la concesionaria Citroën (llamada Grenoble) y de la Distribuidora Quilmes, fue condenador por proferir “reiterados tocamientos” a una de las niñas cuando tenía 8 años, y hasta que cumplió 11 ó 12 años, en un hecho que salió a la luz cuando la menor, ya con 13 años de edad, logró contar lo que le había ocurrido a una profesora del colegio que tomó intervención en el caso y posibilitó que los padres radicaran la denuncia.
También se postula que el sujeto “se aprovechó de la inmadurez emocional” de la adolescente de 14 años para seducirla y consumar una relación sexual.
El acusado prestó declaración indagatoria por primera vez en la audiencia del pasado lunes, y allí reconoció, aunque parcialmente, los hechos que se le imputan, al negar uno de los abusos y al sostener que en el otro caso actuó con el consentimiento de la niña.
Por Cronicasfueguinas.-