El pasado sábado, el delegado gremial Angel Gordillo recibió un telegrama de despido sin justificación por parte de la fábrica Mirgor, ante esta situación, decidió encadenarse en las puertas del establecimiento e iniciar una huelga de hambre. “La empresa hoy está trabajando como corresponde, sacando la carga normalmente, es mentira de que hay un bloqueo y que no los dejamos trabajar”, mencionó.
En comunicación con FM del Pueblo, detalló «por parte de la empresa solo plantean calumnias e injurias, claramente es una persecución gremial y personal», destacando que «la empresa busca el conflicto en conjunto con la justicia».
Asimismo, Gordillo expresó «lamentablemente lo poco que podíamos confiar en la justicia ya no la tenemos por la complicidad que tiene con la empresa, por esa misma razón vamos a seguir con estas medidas», además precisó «no somos escuchados ni por la empresa, ni por el gobierno, ni por la justicia».
En este sentido, afirmó «nadie se acercó a hablar conmigo, hoy me apoyó en mi familia, amigos y los compañeros que están acá, no solo es por mi sino también es por la situación de los compañeros que también despidieron».
Finalmente, indicó «hoy vamos a firmar el fallo de la Cámara de apelaciones pero está en claro la persecución que estamos viviendo».