El ministro de Gobierno de Tierra del Fuego, José Luis Álvarez, comunicó que 131 agentes de la administración pública iniciaron los papeles para acogerse al retiro voluntario, trámite que se podrá realizar hasta el próximo 30 de septiembre de 2018.
Para quienes aún no se encuentran familiarizados con la cuestión, la Ley provincial N°1200 otorga a los empleados de los tres poderes del Estado -entes autárquicos (centralizados y descentralizados), Tribunal de Cuentas y Fiscalía de Estado- la posibilidad de aplicar a este beneficio y percibir, por una única vez, la suma de $150.000 (pesos ciento cincuenta mil).
Además, quienes estén próximos a jubilarse y sean aceptados recibirán un monto no remunerativo que equivale al 60% del salario mensual por un plazo de hasta 36 meses, mientras continúan aportando a la caja hasta obtener el beneficio previsional. El decreto incluye también a quienes lleven pocos años en la administración pública y quieran iniciar otros proyectos laborales o profesionales.
En este sentido, el funcionario manifestó su «entusiasmo» por el número de personas que decidieron adherirse a esta iniciativa, habida cuenta que representa casi el 1% de la planta total actual del Gobierno provincial.
Ante la gran cantidad de adhesiones contabilizadas desde el 1° de agosto, Álvarez indicó que se estaría evaluando la posibilidad de una prórroga en el plazo para inscribirse, más allá del 30 de septiembre convenido inicialmente